jueves, 10 de diciembre de 2015

Punto final.

Ponerle punto final a una historia
es entender que se acaban para siempre
Los besos,
los abrazos,
la compañía incondicional,
las coincidencias,
 lo simultáneo,
lo cotidiano,
las respuestas inmediatas,
los lugares de siempre,
la soledad que se comparte,
los planes de a dos,
las vacaciones soñadas,
las comidas postergadas,
las risas cómplices.

Pero más allá de eso,
ponerle punto final a una historia,
es empezar una distinta
y está vez se trata de un sólo protagonista (una sola)
juntando lo que le quedó de alma
pisoteando tristezas
superando recuerdos
Y volviendo,
(una vez más)
a recomenzar...

miércoles, 18 de noviembre de 2015

Qué pena, amor mío, que me sienta así de sola, que el peor de los naufragios haya sido el de tu cama. 
Qué misterio, amor roto, el que esconden tus mentiras y la sonrisa siempre forzada que le regalas a los demás.
Qué lástima, amor sucio, haber cultivado flores en un suelo que donde la primavera es helada, por eso nunca las veré. 
Qué incertidumbre, amor errado, me da el mañana que no será capaz de dar escenario a nuestras más locas planificaciones. 
Qué tontería, amor pisoteado, la inocencia con la que leí tus páginas y mis deseos de seguir escribiendo en ellas.

Qué tristeza, amor, no pudimos ser, y no lo seremos nunca más.



sábado, 18 de julio de 2015

roto

Me he quemado las manos 
tratando de descubrir 
qué magia te habría traído a mis orillas. 
Me he lastimado los pies 
buscando el camino 
que lleva a la puerta principal de tu hogar.
Me he quedado dormida 
imaginando un futuro a tu lado 
y ahora no puedo dormir, 
planificando lo que será vivir sin ti.

Hemos caído tantas veces,
y sin embargo,
sólo fui conciente de nuestro inevitable final 
en el momento en que la tercer cuerda de tu guitarra 
se rompió.

Y entonces me resigné
al constante círculo de la vida:
todo lo bello algún día acaba
y hay que empezar de nuevo,
hasta la llegada de otra cosa aún más bella.
Y en el medio el yo,
y al final
y al principio,
sin importar el orden,
continúo buscando
ser 
cada 
día 
más 
feliz.


miércoles, 4 de marzo de 2015

Miedo

Me hablaste de tus miedos y dudas
y no pude más que pensar:

"Me sé exactas las coordenadas de tu cama

llegando por el camino que dibuja tu espalda,
y tu sabes bien dónde queda lo que llamo hogar
luego de habértelo mostrado con el largo de mis piernas.
Entonces, ¿Cómo podríamos perdernos?"




lunes, 23 de febrero de 2015

luz

Después de tanto observar de lejos,
después de desear tanto en silencio,
después de esperar cada día para escuchar esa voz,
un día
bajaste del pedestal 
para llenar mis noches con besos de colores
embelleciendo mi piel con un sin fin de caricias,
cuando detuviste el tiempo haciéndome el amor.
Me resulta tan difícil creer
que finalmente te fijaste en mí,
me elegiste,
y me dijiste que era lo que siempre estuviste buscando.

El problema, ya ves,
reside en que ahora
no sé quién soy,
no sé si soy yo la escribe estas líneas
o es quién tu quieres, la que lo hace.
Cada día despierto con el miedo
de que no sea a mí a quien abraces
si no a un espacio ocupado por mí.
Es que no hay forma
ni manera alguna
de que yo y esa persona podamos ser la misma.

O quizás si,
quizás esté viviendo ese sueño que todos quieren
y después de tantos golpes 
se vuelva imposible creer que soy tan feliz
bajo el arcoiris de besos en el que se convirtió tu cama.
Quizás ese Dios del que tanto hablas
por fin haya mirado hacia nosotros
y nos esté dando la oportunidad de ser felices,
al lado del otro, prácticamente desconocido
- y es ahí,
donde 
está 
la magia 
de 
todo 
esto-. 

Estás
presente en cada situación diaria
impidiendo que mi cabeza no haga más que pensarte,
y anoche - por fin - entendí:

Que el horizonte más hermoso de ver
es el que forma la curva de tu espalda cuando duermes boca abajo,
balbuceando palabras con un "mi" ante puesto
y asegurándome que es ahí donde debo estar.